Esta placa es fabricada a partir de una mezcla de cemento, fibras de celulosa, y otros aditivos minerales. Las fibras de celulosa refuerzan la placa, haciéndola más flexible y menos propensa a agrietarse. Las placas de fibrocemento son altamente resistentes a la humedad, lo que las hace ideales para aplicaciones exteriores e interiores en áreas húmedas, como revestimientos de fachadas, cubiertas, y paredes en baños y cocinas. Es un material muy duradero y resistente a impactos, insectos, hongos y a la mayoría de las condiciones climáticas adversas. Estas pueden ser pintadas o recubiertas con otros materiales, y se pueden utilizar en su estado natural o texturizadas para efectos decorativos